tag:blogger.com,1999:blog-39928120813404492782024-02-07T19:43:07.092-08:00RelatorerosMadricitahttp://www.blogger.com/profile/01980803572679393148noreply@blogger.comBlogger114125tag:blogger.com,1999:blog-3992812081340449278.post-71164727303794216552012-01-16T04:05:00.000-08:002012-01-16T04:07:25.141-08:00Primeros días en la ciudad nuevaA este lado del río los olmos se alinean de tal manera frente a él que parecen ser los obedientes guardianes de sus bajas y lentas aguas; estas altas y enmarañadas estructuras le proporcionan una fresca protección en verano, pero ahora, a la espera de su renovada espesura, son solo como un símbolo estético más, una escultura maestra repetida a todo lo largo de su cauce. <br />También los diminutos y asustadizos gorriones se sirven de ellos: es fácil verlos balancearse, juguetonamente, sobre sus desnudas ramas. Son árboles centenarios, columpios centenarios. La frágil presencia de esos pajarillos tiene el efecto de borrar del ambiente, en la fulgurante claridad del aire de año nuevo, la eterna y espesa sensación de agrio derrumbe que llega, desde tiempo inmemorial, del extrarradio de la ciudad.Javier Rodríguezhttp://www.blogger.com/profile/16802771047483745804noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-3992812081340449278.post-38673841598488373632011-12-19T09:53:00.000-08:002011-12-19T09:57:00.749-08:00escena- David, entonces, ya está decidido lo de Nantes, ¿no? – Carmen se deshizo impostadamente del sentimiento de que en realidad le importaba un bledo si su hermano se mudaba o no al extranjero. Esperó un instante un gesto que significara que iba a producirse una respuesta, pero David pugnaba antes que nada con una al parecer rebelde cola de pescado. <br />Helen, su cuñada, sentada justo frente de ella, habló en su lugar:<br />- No va a ser Nantes, al final nos vamos a París. Alejandro le ha prometido a tu hermano el cargo de supervisor del área central. ¿No os lo había dicho. Deivid, hijo, cuenta las cosas…<br /><br />Carmen sonrió a la buena disposición de Helen, así como a sus finas manos, revoloteando graciosamente sobre el mantel de organdí, seña de identidad de las fiestas de Navidad en su familia. Un noble pedazo del imperio británico ante ella, de rostro fino, vestido sabiamente elegido y exquisitas maneras: la chica de Glasgow que había agilipollado a su hermano, un tío de una pieza en otro tiempo. <br />Eran cinco a la mesa, pero sus padres, como siempre, jugaban tan a conciencia el papel de anfitriones perfectos, aterrorizados en realidad de quedar mal ante la eterna invitada que eran solo dos bustos provistos de palas. Miró a su madre y ésta, al saberse observada, se dio por aludida:<br />- El año pasado creo que me quedó mejor. Este año, no sé, no está tan jugoso - buscó en una rápida batida miradas de apoyo a los demás pero todos pasaron por alto el comentario.Javier Rodríguezhttp://www.blogger.com/profile/16802771047483745804noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-3992812081340449278.post-57326013514269475182011-12-15T04:57:00.000-08:002011-12-15T04:58:28.865-08:00paso en falsoEran las seis y veinte de la tarde de un veintiséis de junio. Según sus meticulosos cálculos, le quedaban dos días diecisiete horas y cuarenta minutos. Al abrir el sobre y comprobar que la carta eran las órdenes de Franz, quedarían algunos menos, pero le daría tiempo de todos modos. Las órdenes de Franz eran exactamente lo que ella haría entre ese momento y el momento de estallar la bomba. <br />En el fondo era todo ridículamente fácil, ya que su responsabilidad era transportar un paquete hasta una estación de tren, en París. En tres líneas su participación había quedado diseñada por un cerebro que jamás había visto, pero al que veneraba igualmente, como si fuera el paladín de un nuevo mundo. <br />En forma de publicidad de una empresa de cursos a distancia, periódicamente, a lo largo de los últimos tres años, la información llegaba, y era ejecutada inexorablemente, sin resquicio de duda. Ninguno de sus hermanos sospechaba nada, más allá de la extrañeza por la insistencia de las cartas, siempre sin respuesta. Se metió la carta en el bolsillo y descolgó el teléfono, para enviar una señal sin voz a un número de contacto. <br />Corrió todas las cortinas, en un procedimiento poco común, que no tenía nada que ver con el protocolo de seguridad; era más bien una forma velada de dar carpetazo a algo, de dejar saldada una antigua querella secreta con su familia, con ella misma en su familia, con su pasado de todas maneras. <br />No sintió alivio alguno al terminar de hacerlo; al contrario, más bien una aguda sensación de que esa salida era una salida en falso, tal vez solo un camino que le apartaba del camino principal, por donde ya había transitado durante tanto tiempo, sin resultado alguno, y que ahora, al evitarlo de una forma drástica, seguramente irreversible, quedaba como flotando en el aire, provocando en su animo ese sabor a algo que se ha dejado irremediablemente antes de tiempo, una batalla perdida sin haber puesto en juego todas las armas.Javier Rodríguezhttp://www.blogger.com/profile/16802771047483745804noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-3992812081340449278.post-83671989118088609742011-12-14T04:36:00.000-08:002011-12-14T04:37:49.741-08:00EncerronaLa fría superficie le despertó y dio un respingo al verse desnudo y suspendido en un espacio desconocido. Observó la estructura que le contenía y pensó que debería esperar a despertarse para que aquello dejara de ocurrir, aunque supo al momento que ese pensamiento era solo un modo de escapar al pánico.<br /> <br />¿Cuánto podría medir el cubo de cristal donde se encontraba?, ¿y porqué no había mas que una masa blanquecina, (niebla, ¿que podía ser sino?) más allá del habitáculo, en el mismo lugar donde, hasta hacía poco, estaba su casa, su mujer, su diana electrónica recién comprada?<br /><br />La sólida y transparente construcción no tenía abertura alguna; la había inspeccionado, palpando con la mano abierta, centímetro a centímetro; era una única pieza, sin fijaciones ni soldaduras. Se imaginó que esperando simplemente tendría lugar algo, por parte de alguien, en algún sitio. <br /><br />Pensó en Gregorio Samsa y en José Luis López Vázquez en La cabina. Se dejó llevar por la sensación de que quizá el escritor que había imaginado en otro tiempo que llegaría a ser se encontraría al final existiendo, y que estaría en ese momento moviendo los hilos de su existencia encerrada, cómodamente arrellanado en su asiento frente al ordenador, encaprichándose de su incierto destino.Javier Rodríguezhttp://www.blogger.com/profile/16802771047483745804noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-3992812081340449278.post-40543582369192628692011-11-30T00:56:00.001-08:002011-11-30T04:11:28.779-08:00El jugador.<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">Steve estaba colocando las cartas sobre la mesa de la cocina. Iba sacándolas de la baraja de dos en dos y poniéndolas en el lugar que le correspondían. Dos de picas, cinco de tréboles. No coincidía con ninguna de las que ya tenía en las columnas de palos, así que las puso en el montón de descartes. J de corazones, cuatro de picas. Colocó la J encima de la reina de corazones. El cuatro lo dejó en el montón de descartes. Era agradable estar allí sentado, con la luz del medio día entrando por la ventana.</span></div>
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<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">Escuchó unas llaves abriendo la puerta del apartamento y después vio a su hijo entrar. Steve se dio cuenta que diecisiete años pasan rápido y uno a penas ve en que momento crecen tanto.</span></div>
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<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">- Hola - dijo el muchacho.</span></div>
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<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">- ¿Va todo bien?</span></div>
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<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">- Si, claro que sí - contestó mientras abría la nevera y sacaba una botella de leche. Se sirvió un vaso mientras Steve le observaba.</span></div>
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<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">- Muchacho, me gano la vida leyendo las caras de la gente, y algo me dice que a ti te pasa algo.</span></div>
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<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">El chico no contestó. Se limitó a beber un trago de leche mirando al infinito.</span></div>
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<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">- Dame un vaso de leche y trae las fichas - dijo Steve recogiendo las cartas.</span></div>
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<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">Su hijo sacó un vaso limpio de un estante y lo llenó con lo que quedaba en la botella. Después salió de la cocina y volvió con una caja de madera sin tapadera llena de fichas de plástico de distintos colores. Se sentó en frente de su padre y empezó a contar y a hacer dos montones de fichas, uno para su padre y otro para él. Después Steve repartió las cartas.</span></div>
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<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">- ¿Que va mal?</span></div>
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<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">- Nada - dijo el chico mirando las cartas.</span></div>
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<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">- ¿Es una chica?</span></div>
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<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">El chico no contestó. Jugaron dos manos sin hablar nada, en un silencio solo roto por el sonido de las fichas de apuestas.</span></div>
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<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">- La verdad es que si que me gusta alguien - dijo mientras Steve volvía a repartir las cartas de la tercera mano.</span></div>
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<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">- ¿Y tú a ella?</span></div>
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<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">- Pues no lo se - mientras decía esto miró sus cartas e hizo una apuesta muy alta.</span></div>
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<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">- ¿Por que haces eso?</span></div>
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<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">- ¿El que?</span></div>
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<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">- Hacer una apuesta tan alta. Ahora no se si tienes buenas cartas o malas cartas, pero lo que acabas de conseguir es asustarme. Si de verdad tienes una buena mano, es mejor ir despacio.</span></div>
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<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">Steve tiró sus cartas en el centro de la mesa y dejó que su hijo recogiese el poco beneficio que había obtenido con su mala jugada.</span></div>
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<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">- Recuerda. Nunca vayas demasiado fuerte sin saber lo que tiene el otro.</span></div>
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<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">Los dos bebieron un trago de leche antes de volver a repartir cartas.</span></div>
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<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">- ¿Tu le gustas a ella?</span></div>
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<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">- Pues no lo se.</span></div>
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<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">Steve puso un par de fichas en el centro de la mesa. Su hijo hizo lo mismo, y añadió una más. Steve aceptó la apuesta. Hicieron un descarte y volvieron a apostar. Cada apuesta que hizo Steve fue superada por su hijo. Steve aceptó cada subida, haciendo él mismo la suya. Así estuvieron los dos hasta que en el montón de fichas central estaba la mitad de las fichas de cada uno. Steve volvió a subir la apuesta una última vez. Su hijo cogió igual cantidad de fichas de su montón y se dispuso a ponerlas en el centro.</span></div>
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<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">- ¿Estas seguro de que puedes ganar esta mano? - dijo antes de que las soltase.</span></div>
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<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">- ¿Que otra cosa puedo hacer? ya he apostado la mitad de mis fichas. Tengo que seguir jugando si quiero tener una oportunidad.</span></div>
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<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">- No, chico. No importa cuanto has apostado. Tienes que saber cuando hacer la jugada y arriesgar, pero también tienes que saber cuando retirarte, no importa cuanto vayas a perder. Si juegas hasta el final sin una buena mano, la cosa se puede poner peor.</span></div>
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<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">El muchacho volvió a dejar las fichas a su lado y tiró las cartas al centro de la mesa. Steve recogió sus ganancias y se dispuso a repartir otra vez.</span></div>
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<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">Ambos miraron su nueva mano de cartas.</span></div>
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<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">- El problema es que hay otra chica que va detrás de mi. Y si le digo algo a la que me gusta, la otra ya no va a querer saber nada, y bueno, no es que me guste mucho, pero algo es algo.</span></div>
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<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">Steve hizo una apuesta fuerte, dejando un buen montón en el centro de la mesa. Su hijo contó las fichas para igualar la apuesta, y luego empezó a contar las fichas que aún tenía en su lado de la mesa.</span></div>
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<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">- ¿Que haces? - preguntó Steve.</span></div>
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<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">- Contando las fichas que me quedan.</span></div>
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<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">- Escucha, cuando uno está sentado a la mesa, jugando, no debe contar nunca sus fichas. Solo mirar sus cartas e intentar ganar con lo que tiene. Pero no cuentes. Tanto si vas ganando como si vas perdiendo.</span></div>
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<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">Los dos siguieron jugando hasta que la luz blanca del medio día se convirtió en la luz rojiza del atardecer. Luego el chico se levantó de la mesa, se despidió de su padre y se fué a su habitación a estudiar.</span></div>
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<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">Steve se quedó solo en la cocina, escuchando el ruido de los coches en el exterior, conducidos por gente que volvía de su oficina a casa después de haber trabajado ocho horas.</span></div>
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<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;"><br /></span></div>
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</div>Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/00143319790218670240noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-3992812081340449278.post-44568036203396289612011-11-28T08:42:00.001-08:002011-11-29T00:50:57.207-08:00Fúmate uno<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">Una tarde de otoño recibí una llamada de Oso. Quería que le acompañase a un recado. Me dijo que llevase el coche.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">Me hizo conducir hasta un barrio bien a las afueras de Madrid. Uno de esos barrios nuevos con avenidas de dos carriles y sin una sola panadería donde se han mudado familias con algo de dinero. Estuvimos buscando una calle durante un buen rato. Era casi la una de la noche y no había nadie a quien preguntar. Cuando la encontramos, me indicó que aparcase. No nos bajamos del coche. Dijo que tendríamos que esperar un rato. En mi cabeza aún tenía metido el problema que tuvimos en el almacén, hacía ya un par de meses.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">- Oso, no se te ocurra encender uno de esos puros dentro de mi coche, que luego huele fatal - le dije cuando le vi sacar un habano del tamaño del brazo de un bebe. </span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">- Hermoso, no son mis puros. Tu coche coche ya apesta sin mi ayuda.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">- Pues si te parece apestoso, no me llames - Mientras decía esto él le quitaba la vitola a su cigarro.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">- ¿Quieres uno?</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">- No, gracias. Mi padre fuma puros. Y siempre dice que no hay que quitarles la vitola, así que no creo que sepas mucho de esto. Si te viese quitarle la vitola a un Cohiba como ese, te diría algo.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">- ¿Si? vaya, hombre ¿y por que dice tu padre que no le puedo quitar este papel de un puro? - dijo mientras levantaba en alto la insignia roja y dorada.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">- Pues por que a veces no las pegan bien, la cola se sale y se pega al cigarro, y si lo arrancas, puedes romper la capa de fuera y te lo cargas.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">Oso se quedó mirandome un momento, encendió el puro, se recostó en el asiento del coche y empezó a fumar en silencio. Estuvimos así una media hora. Después apareció un tipo que venía caminando.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">- Aquí está. Estate atento. No te bajes del coche a menos que la cosa se ponga fea.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">A la vez que me decía esto, se ponía unos guantes de cuero que había sacado de un bolsillo de la chaqueta y que parecían muy ajustados, pero que ya estaban muy adaptados a la forma de sus manos y de sus nudillos. Cuando el tipo que venía caminando llegó a la altura del coche, Oso abrió la puerta y salió. Pude ver la cara del otro. Su cara, al vernos, se transformó en una mueca de terror. Oso le dió un primer puñetazo en la nariz antes de decir nada. El tipo dió dos pasos hacia atrás y Oso le agarró de la solapa de la americana para que no callese al suelo. Luego le volvió a golpear en la cara y esta vez si le dejó caer. Una vez en el suelo le dio una patada en el estomago, luego se agachó, le dijo algo y le echó una bocanada de humo del puro que no había soltado de entre sus labios. Arranqué el motor antes de que Oso volviese a entrar, y cuando lo hizo, nos fuimos de allí con tranquilidad.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">Iba conduciendo de vuelta al centro de Madrid cuando Oso me enseñó el puro que estaba intacto a pesar de la pelea.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">- ¿Sigue tu padre fumando puros? - me preguntó.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">- Si.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">- Pues dile una cosa. Si me gasto quince euros en un puro, a nadie mas que a mi le importa lo que estoy fumando. Les quito la vitola igual que les quito la etiqueta a mis trajes. Hace falta el trabajo de mucha gente para hacer uno de estos. Y si el que pega el puto papelito es tan idiota que no sabe hacerlo bien, o lo hace mal por descuido, entonces me está faltando al respeto a mi y todos los que han trabajado en esto. Así que si un puro se rompe por eso, no merece ser fumado. ¿Has entendido?</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">- Si. Ahora si.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">Aquella fué la primera vez que Oso y yo nos sentamos a fumar juntos.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/00143319790218670240noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-3992812081340449278.post-32183363361278844142011-11-24T13:23:00.001-08:002011-11-29T00:50:01.292-08:00Guardame el monedero<br />
<div style="background-color: transparent;">
<div style="text-align: left;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace; font-size: 15px; white-space: pre-wrap;">Llegué tarde, como siempre. Carmen y su novio ya estaban esperandome. Le di dos besos a ella. Le dije “hola” a él. Me parecía un imbecil, y supongo que yo a él, pero intentabamos llevarnos. Carmen era una buena tía, siempre me habia gustado. No era demasiado inteligente, pero era de esas tías que cuando te ven triste te dan ánimos, y sobre todo estaba muy buena. Con dos ojos oscuros como fosas de cementerio, un pelo a juego y dos tetas mas grandes que su propia cabeza, a pesar de que no la sobraba ni un solo gramo de grasa en todo su cuerpo. Y todo esto condensado en un metro y medio de altura. Su piel era dorada. Al menos la de los hombros y el escote. Llevaba puesta una camiseta de tirantes. Aquella noche hacía demasiado calor como para llevar otra cosa.</span></div>
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;"></span><br />
<div style="text-align: left;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;"><span class="Apple-style-span" style="font-size: 15px; white-space: pre-wrap;">- Toma, guardame esto, anda, que este no quiere y no tengo bolsillos.</span></span></div>
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">
<span style="background-color: transparent; vertical-align: baseline;"><div style="text-align: left;">
<span class="Apple-style-span" style="font-size: 15px; white-space: pre-wrap;">Me lo dijo señalando a su novio con una mano, mientras que con la otra me ofrecía su monedero. Lo metí en mi bolsillo.</span></div>
</span><span style="background-color: transparent; vertical-align: baseline;"><div style="text-align: left;">
<span class="Apple-style-span" style="font-size: 15px; white-space: pre-wrap;">Eran ya mas de las once. Decidimos ir a un bar de copas, de esos con la música muy alta y la luz muy baja. Pedimos una cerveza cada uno.</span></div>
</span><span style="background-color: transparent; font-size: 15px; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"><div style="text-align: left;">
- Marisa me parece una buena tía. Siempre está de broma - dijo el novio de Carmen.</div>
</span><span style="background-color: transparent; font-size: 15px; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"><div style="text-align: left;">
- Si. Aunque tiene la costumbre de arrimar mucho las tetas cuando besa - dije yo.</div>
</span><span style="background-color: transparent; font-size: 15px; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"><div style="text-align: left;">
- Las tías que hacen eso me caen fatal. Siempre calentando - dijo Carmen.</div>
</span><span style="background-color: transparent; vertical-align: baseline;"><div style="text-align: left;">
<span class="Apple-style-span" style="font-size: 15px; white-space: pre-wrap;">- Yo creo que lo hace sin darse cuenta - contesté dándole el último trago a la cerveza.</span></div>
</span><span style="background-color: transparent; font-size: 15px; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"><div style="text-align: left;">
- Un poco golfa si que es. - dijo el novio de Carmen - Voy a mear.</div>
</span><span style="background-color: transparent; font-size: 15px; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"><div style="text-align: left;">
Carmen y yo quedamos en silencio durante un minuto, hasta que vimos desaparecer a su novio entre la multitud. Después se arrimó, pegando mucho su cuerpo contra el mio.</div>
</span><span style="background-color: transparent; vertical-align: baseline;"><div style="text-align: left;">
<span class="Apple-style-span" style="font-size: 15px; white-space: pre-wrap;">- Cuando una tía te arrima las tetas, sabe lo que está haciendo. - me susurró al oído al tiempo que ponia su mano en mi paquete - ¿Tienes bien guardado mi monedero?</span></div>
</span><span style="background-color: transparent; font-size: 15px; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"><div style="text-align: left;">
- Eso no es tu monedero.</div>
</span><span style="background-color: transparent; font-size: 15px; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"><div style="text-align: left;">
- Lo se.</div>
</span><span style="background-color: transparent; vertical-align: baseline;"><div style="text-align: left;">
<span class="Apple-style-span" style="font-size: 15px; white-space: pre-wrap;">Luego se quedó mirándome a los ojos. Cuando volvió su novio, ella dijo que no quería otra cerveza y prefería irse a casa. Sola.</span></div>
</span></span></div>Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/00143319790218670240noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-3992812081340449278.post-45057231706322086872011-11-24T03:46:00.000-08:002011-11-24T03:49:14.103-08:00El coche y la nieblaEl coche con la matrícula falsificada finalmente se detuvo delante del nuestro con un frenazo más bien brusco. Era un robusto 4x4 azul marino, cuya marca no me sonaba de nada. Daba la sensación de que no volvería a moverse de allí durante mucho tiempo. Estábamos en una carretera secundaria que no conocíamos, camino de un encuentro con unos amigos. <br />Al frenar, su parte trasera se nos presentó nítidamente. Amanda y yo seguimos con la mirada clavada en la matrícula; era difícil no hacerlo ya que era exactamente la misma que la nuestra. <br />Desde que nos dimos cuenta, y después del shock inicial, no habíamos hecho más que discutir sobre lo que debíamos hacer. Pararnos, dar la vuelta, hacerle señales o llamar a la policía. O seguir adelante. Seguimos adelante, con la mirada clavada en la placa, en nuestra placa. <br /><br />Al pararnos nos miramos. Buscábamos en el otro una pista sobre qué hacer. Nos mantuvimos en silencio. El silencio lo envolvía todo. De delante de nosotros, tras el cristal, una presencia inesperada nos impedía el paso. ¿Por qué? ¿Qué quería de nosotros?<br /><br />Una densa niebla comenzó a envolverlo todo. Se estaba levantando con tal rapidez que daba la sensación de que el 4X4 la estaba haciendo salir desde los tubos de escape. Al poco dejamos de verlo, y en un momento todo lo que nos envolvía afuera era una enorme masa blanca, tan blanca que costaba creer que no fuera sólida.<br /><br />Encendí la radio, en un extraño gesto, supongo que para distraer el terror. Los dedos apenas acertaban con los botones. Un sonido sibilante dio paso a una voz de hombre, y a una indicación muy clara, dirigida a nosotros. Hablaba de una forma amable, casi cantarina. <br /><br />No había muchas posibilidades. Hicimos lo que nos dijo. Al rato, exhaustos, casi jadeantes, vimos al coche alejarse de nosotros.Javier Rodríguezhttp://www.blogger.com/profile/16802771047483745804noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-3992812081340449278.post-10775826903512659272011-11-23T02:00:00.001-08:002011-11-23T03:02:35.556-08:00Bukowski y la creación.<span class="Apple-style-span" style="font-size: large;">Aire y luz y tiempo y espacio.</span><br />
<br />
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; margin-left: 0cm; margin-right: 0cm; margin-top: 0cm;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New'; font-size: 13px;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; margin-left: 0cm; margin-right: 0cm; margin-top: 0cm;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New'; font-size: 13px;"><br /></span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; margin-left: 0cm; margin-right: 0cm; margin-top: 0cm;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">"-ya sabes, no he tenido una familia, un trabajo,</span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; margin-left: 0cm; margin-right: 0cm; margin-top: 0cm;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">algo siempre se ha puesto en el </span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; margin-left: 0cm; margin-right: 0cm; margin-top: 0cm;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">camino</span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; margin-left: 0cm; margin-right: 0cm; margin-top: 0cm;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">pero ahora</span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; margin-left: 0cm; margin-right: 0cm; margin-top: 0cm;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">he vendido mi casa, he encontrado este</span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; margin-left: 0cm; margin-right: 0cm; margin-top: 0cm;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">lugar, un gran estudio, deberías ver el espacio y</span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; margin-left: 0cm; margin-right: 0cm; margin-top: 0cm;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">la luz.</span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; margin-left: 0cm; margin-right: 0cm; margin-top: 0cm;">
<span class="GramE"><span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">por primera vez en mi vida voy a tener</span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; margin-left: 0cm; margin-right: 0cm; margin-top: 0cm;">
<span class="GramE"><span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">un lugar y el tiempo para</span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; margin-left: 0cm; margin-right: 0cm; margin-top: 0cm;">
<span class="GramE"><span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">crear."</span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; margin-left: 0cm; margin-right: 0cm; margin-top: 0cm;">
<span class="GramE"><span style="font-size: 10pt;"><span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;"><br /></span></span></span></div>
<div class="MsoNormal" style="margin-bottom: 0.0001pt; margin-left: 0cm; margin-right: 0cm; margin-top: 0cm;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">no, cariño, si vas a crear</span></div>
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">vas a crear si trabajas</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">dieciséis horas al día en una mina de carbón</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">o</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">vas a crear en un cuarto pequeño con tres niños</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">mientras que estas</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">cobrando el paro,</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">vas a crear con parte de tu mente y de tu cuerpo </span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">destrozados,</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">crearás ciego, </span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">mutilado, </span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">demente,</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">vas a crear con un gato trepando por tu</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">espalda mientras</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">la ciudad entera tiembla en terremotos, bombardeos,</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">inundaciones y fuego.</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;"><br /></span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">cariño, aire y luz y tiempo y espacio</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">no tienen nada que ver con esto</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">y no crean nada, excepto quizás una vida mas larga para encontrar</span><br />
<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">nuevas excusas.</span><br />
<br />
<br />
<br />
<br />
<span class="Apple-style-span" style="font-size: large;">Como ser un gran escritor</span><br />
<br />
<span class="Apple-style-span" style="background-color: white;"><span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Courier New', Courier, monospace;">tienes que follar con muchas mujeres<br />bellas mujeres<br />y escribir unos pocos poemas de amor decentes<br /><br />y no te preocupes por la edad<br />y/o los nuevos talentos.<br /><br />sólo bebe más cerveza más y más cerveza.<br /><br />ves al hipódromo por lo menos una vez<br />a la semana<br /><br />y gana<br />si es posible.<br />aprender a ganar es difícil,<br />cualquier idiota puede ser un buen perdedor.<br /><br />y no olvides tu Brahms,<br />tu Bach y tu<br />cerveza.<br /><br />no te esfuerces.<br />duerme hasta el mediodía.<br /><br />evita las tarjetas de crédito<br />o pagar cualquier cosa a tiempo.<br /><br />acuérdate de que no hay un pedazo de culo<br />en este mundo que valga más de 50 dólares.<br /><br />y si tienes capacidad de amar<br />amáte a ti primero<br />pero siempre ten en cuenta la posibilidad de<br />la derrota total<br />ya sea por buenas o malas razones.<br /><br />un sabor temprano de la muerte no es<br />necesariamente<br />algo malo.<br /><br />quédate fuera de las iglesias y los bares y los<br />museos<br />y como las araña se<br />paciente,<br />el tiempo es la cruz de todos.<br />mas<br />el exilio<br />la derrota<br />la traición<br /><br />toda esa basura.<br /><br />quédate con la cerveza<br /><br />la cerveza es sangre continua.<br /><br />una amante continua.<br />consigue una máquina de escribir grande<br />y mientras los pasos van y vienen<br />más allá de tu ventana<br /><br />dale duro a esa cosa<br />dale duro.<br /><br />haz de eso una pelea de peso pesado.<br /><br />haz como el toro en la primer embestida.<br /><br />y recuerda a los perros viejos,<br />que pelearon tan bien:<br />Hemingway, Celine, Dostoievsky, Hamsun.<br /><br />si crees que no se volvieron locos en habitaciones<br />pequeñas<br />como te está pasando a ti ahora,<br />sin mujeres<br />sin comida<br />sin esperanza...<br /><br />entonces no estás listo<br /><br />bebe más cerveza.<br />hay tiempo.<br />y si no hay<br />está bien<br />igual. </span></span>Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/00143319790218670240noreply@blogger.com4tag:blogger.com,1999:blog-3992812081340449278.post-72346719981118811232011-11-22T05:21:00.000-08:002011-11-22T05:22:04.135-08:00El CercoAl comienzo de la época de nieves, el Poblado fue rodeado por las hordas de la tribu rival. Acamparon alrededor con todas sus armas y no dejaban salir a nadie. Pronto comenzaron a escasear los víveres y la situación fue haciéndose insostenible. <br />El Jefe del poblado, Kuma, que había sido elegido por el Consejo de Sabios solo dos temporadas antes, no sabía muy bien qué hacer. Intentó muchas estrategias, pero ninguna de ellas terminó dando resultado. Envió a sus mejores guerreros a internar abrir una salida, pero todo fue en vano. También ordenó excavar túneles con el fin de salvar la línea enemiga, pero todos los pobladores que lo intentaron fueron atrapados y ejecutados. <br /><br />El anterior jefe del poblado, Marimba, no hacía gran cosa para ayudar a salir de la situación. El y los suyos, los integrantes del clan que había resultado derrotado en la anterior elección de Gran Jefe, solo esperaban y no decían ni proponían nada, tan solo repetían una y otra vez que la situación no podía continuar así. <br /><br />El tiempo pasó y gracias a la astucia de algunos pobladores disfrazados la gente del poblado no sucumbió al hambre, ya que en redadas nocturnas conseguían hacerse con algunas provisiones, cazando animales. Aún así, la situación era crítica.<br /><br />La temporada siguiente, para tratar de dar solución al cerco de la tribu rival, el Consejo de sabios convocó una asamblea. Duró toda la noche. En ella se decidió que Kuma fuera apartado del poder, y que lo ostentara, de ahí en adelante, Marimba. <br /><br />Hubo grandes celebraciones por parte de Marimba y su clan, pero pronto se vio que todo había sido en vano.Javier Rodríguezhttp://www.blogger.com/profile/16802771047483745804noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-3992812081340449278.post-80488601683839777032011-11-03T00:12:00.000-07:002011-11-03T00:18:15.370-07:00Seamos amigos.<br />
<div style="background-color: transparent;">
<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial;"><span class="Apple-style-span" style="font-size: 15px; white-space: pre-wrap;">Estábamos</span></span><span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial; font-size: 15px; white-space: pre-wrap;"> sentados en el sofá de mi casa. Cuando pasó su lengua por el pegamento del papel de fumar alargué mi mano para coger la bolsa con el tabaco.</span></div>
<div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial; font-size: 15px; white-space: pre-wrap;">- Fúmate este. Ya hago yo otro.- dijo, ofreciéndome el cigarro que tenia en la mano. Lo encendí y le dí una calada. Luego se lo puse en los labios para que ella diese otra mientras ponía tabaco sobre un papel.</span></div>
<span style="background-color: transparent; font-family: Arial; font-size: 11pt; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"></span><br />
<div style="text-align: justify;">
<span style="background-color: transparent; font-family: Arial; font-size: 11pt; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">- Así que no se lo que hacer. - dijo - Me gustaría tener un compañero sexual estable, con el que haya algo mas que solo follar. No es que quiera tener novio, o algo así. No quiero sentirme atada. Pero es que los tíos con los que me acuesto, si les pregunto que si quieren ir a tomar algo, o se asustan, o se enamoran.</span></div>
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial; font-size: 15px; white-space: pre-wrap;">- ¿Y por que no follamos tu y yo? - dije después de dar otra calada.</span><br />
<span style="background-color: transparent; font-family: Arial; font-size: 11pt; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"></span><br />
<div style="text-align: justify;">
<span style="background-color: transparent; font-family: Arial; font-size: 11pt; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">- ¿Contigo? no me apetece. No se. Estoy muy a gusto con esto que tenemos.</span></div>
<span style="background-color: transparent; font-family: Arial; font-size: 11pt; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"></span><br />
<div style="text-align: justify;">
<span style="background-color: transparent; font-family: Arial; font-size: 11pt; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">- ¿Y que tenemos?</span></div>
<span style="background-color: transparent; font-family: Arial; font-size: 11pt; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"><div style="text-align: justify;">
- Pues somos amigos ¿no? Nos vemos dos o tres veces a la semana, y hablamos todos los días. Esto me gusta, por que no me siento sola, y el sexo lo complicaría todo.</div>
</span><span style="background-color: transparent; font-family: Arial; font-size: 11pt; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"><div style="text-align: justify;">
Acabamos de fumar en silencio, terminando de ver la película que ponían en la televisión y que hasta ese momento no habíamos hecho ningún caso. En los títulos de crédito la miré y estaba dormida. La música la despertó. Miró a su al rededor.</div>
</span><span style="background-color: transparent; font-family: Arial; font-size: 11pt; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"><div style="text-align: justify;">
- Joder, que sueño. ¿Te importa si me quedo a dormir? - dijo, estirando sus brazos hacia el techo.</div>
</span><span style="background-color: transparent; font-family: Arial; font-size: 11pt; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"><div style="text-align: justify;">
- Ya sabes que no.</div>
</span><span style="background-color: transparent; font-family: Arial; font-size: 11pt; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"><div style="text-align: justify;">
Fuimos juntos a la habitación. Abrió el armario y sacó una camiseta negra, descolorida y algo rota del segundo cajón. Después se fue al cuarto de baño mientras que yo me desnudaba y me metía debajo del edredón en calzoncillos.</div>
</span><span style="background-color: transparent; font-family: Arial; font-size: 11pt; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"><div style="text-align: justify;">
Cuando volvió me fijé que aquella camiseta tenía algún tipo de patrón especial, o quizá fuese el cuerpo de ella que la deformaba para obligarla a ajustarse a sus curvas. Aquella prenda, unos calcetines negros y unas bragas era todo lo que llevaba puesto, como siempre que se quedaba a dormir. Saltó por encima de mi para poder llegar al lado de la cama que estaba mas cercano a la pared. Su lado de la cama.</div>
</span><span style="background-color: transparent; font-family: Arial; font-size: 11pt; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"><div style="text-align: justify;">
Nos dimos las buenas noches y apagué la luz.</div>
</span><span style="background-color: transparent; font-family: Arial; font-size: 11pt; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"><div style="text-align: justify;">
- ¿Decías en serio lo de tener sexo juntos? - dijo después de unos minutos. - ¿Me has oido?</div>
</span><span style="background-color: transparent; vertical-align: baseline;"><div style="text-align: justify;">
<span class="Apple-style-span" style="font-family: Arial;"><span class="Apple-style-span" style="font-size: 11pt; white-space: pre-wrap;">- Si, te he </span><span class="Apple-style-span" style="font-size: 15px; white-space: pre-wrap;">oído</span><span class="Apple-style-span" style="font-size: 11pt; white-space: pre-wrap;"> - supongo que tardé mucho en contestar - no, no lo decía en serio, solo quería ayudarte con tu problema. ¿Porque lo preguntas?</span></span></div>
</span><span style="background-color: transparent; font-family: Arial; font-size: 11pt; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"><div style="text-align: justify;">
Ahora era ella la que se había quedado en silencio.</div>
</span><span style="background-color: transparent; font-family: Arial; font-size: 11pt; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"><div style="text-align: justify;">
- No, por nada. Es que no quería que te sintieses mal. Bueno. Así mejor.</div>
</span><span style="background-color: transparent; font-family: Arial; font-size: 11pt; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"><div style="text-align: justify;">
A mi me costó dormirme, y ella también se mantuvo despierta durante mucho tiempo.</div>
</span><span style="background-color: transparent; font-family: Arial; font-size: 11pt; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"><div style="text-align: justify;">
A la mañana siguiente me levanté y me vestí. Antes de salir por la puerta me puse de cuclillas junto a la cama, la miré a la cara durante un instante, tratando de adivinar donde estarían sus labios en la penumbra.</div>
</span><span style="background-color: transparent; font-family: Arial; font-size: 11pt; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"><div style="text-align: justify;">
- Me voy a quedar un rato. No quiero levantarme tan temprano. Hoy no.</div>
</span><span style="background-color: transparent; font-family: Arial; font-size: 11pt; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"><div style="text-align: justify;">
- Ya lo se. Te he dejado café recién hecho, y ya sabes donde está lo demás. -la dije</div>
</span><span style="background-color: transparent; font-family: Arial; font-size: 11pt; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;"><div style="text-align: justify;">
Cerré la puerta de la calle intentando no hacer ningún ruido.</div>
</span></div>Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/00143319790218670240noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-3992812081340449278.post-79148388224519465562011-10-11T15:28:00.000-07:002011-10-11T15:29:42.764-07:00Calle OrenseComo una de las hermanas pequeñas del paseo de la Castellana, a la que flanquea a su izquierda desde los Nuevos Ministerios hasta las inmediaciones de la Plaza de Castilla, la calle Orense es una larga recta que une el tráfico furioso de Raimundo Fernández Villaverde con la apacible Rosario Pino, en la que desemboca. <br />Sin embargo al hacerlo no es ya la calle tumultuosa que era en sus inicios. Parece haber ido evolucionando desde el jolgorio de la primera juventud hasta la calma final de la edad madura: el general Perón, con su arrogante salida desde Castellana, hizo de ella dos, fiel a su ímpetu militar.<br /><br />Vista en conjunto es solo una más, una mezcla de asfalto, ladrillo, acero y hormigón. <br /><br />Oficinas y edificios de viviendas alzándose a derecha e izquierda, y bajo ellas, en espacios desigualmente repartidos, pequeñas tiendas y franquicias millonarias, conviviendo aún, quien sabe cómo. <br /><br />Vehículos avanzando y parándose en espasmódicas remesas, y transeúntes yendo y viniendo, como en otras tantas calles de Madrid. A ratos, los residentes, como extranjeros en tierra propia, tratan de hacer vida de barrio, allá donde pueden.<br /><br />Y luego están ellos, el detalle crucial que la hace distinta: los soportales. Salvando la Plaza Mayor, es raro encontrarlos en la capital, al menos en espacios comerciales de la zona centro.<br /><br />Ahora me llega el recuerdo de montones de soportales recorridos en aciagos y memorables días de infancia y adolescencia. Y lo que queda de ellas es un poso familiar y entrañable hacia esas galerías, que las evoco siempre, no sé porqué, de noche y lloviendo. <br />Esos soportales de la calle Orense son reductos ahora donde al pasear por ellos aflora algo del aquellos antiguos sentimientos, aunque sean ya tantos los años transcurridos. Hablan de protección, de guarecerse un poco de la violencia de la ciudad, o de la vida.Javier Rodríguezhttp://www.blogger.com/profile/16802771047483745804noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-3992812081340449278.post-89786173243798392112011-09-14T14:14:00.000-07:002011-09-14T14:25:21.411-07:00Inspiración y la fotofobia de AlmodóvarAlves, el antiguo albañil reconvertido en escritor se atusó la perilla con cansada desidia mientras intentaba dar con su nuevo personaje. Se encontraba de pie, quieto, mirando a través de la ventana de su estudio. Ésta daba a un patio interior hosco y desvencijado, el patio que había sido la patria chica donde habían brotado, mágica, instantáneamente, los personajes que habían poblado sus dos novelas anteriores, escritas allí. <br /><br />Permaneció en esa postura unos minutos, y luego cerró los ojos, para aliviar la creciente tensión que sentía en ellos. Ese fue tal vez el intervalo que necesitó Almodóvar para comenzar su ascenso desde el mugriento suelo del patio hasta la tercera planta, donde Alves le esperaba, aún sin saber que se trataba de él. <br />El director se elevó encaramado en una densa voluta de humo de pipa, con unas oscuras gafas presidiendo su redonda cara, y, posándose decididamente en el alféizar de la ventana, le saludó, con aires de suficiencia y encanto a partes iguales:<br />- Hola. Un poco más y me mato. A ver si hacéis algo con esta casa, que se os va a caer encima el día menos pensado. Disculpa por presentarme así, con gafas de sol en plena noche, pero no soporto ni una partícula de luz. Sufro de fotofobia. Sufro de fotofobia, sufro de fotofobia, tengo la impresión de no decir otra cosa desde este último año.<br /><br />Alves sonrió, recogió el testigo que le habían tendido tras el cristal, y, apartando la vista del patio, regresó a la blanca luminosidad de la pantalla del ordenador, donde empezó a teclear:<br />”Almodóvar se levantó de la silla una vez más. El esbozo del personaje no le convencía nada. Necesitaba otra cosa para esa escena del guión inicial escrito a medias con su hermano, que debía estar terminada para el día siguiente por la tarde. <br />Finalmente se detuvo frente a la ventana del despacho, corrió la cortina y se dedicó unos minutos a contemplar el trabado tráfico, que llenaba casi completamente la calle. Le iba venciendo el sueño, la noche anterior había dormido cuatro horas escasas, y durante un momento se durmió literalmente, allí de pie, frente al cristal. <br />Un coche, un escarabajo descapotable rojo, aparcó indebidamente justo frente a su portal, y de él vio bajarse a un hombre. Era corpulento y llevaba sombrero de fieltro de ala ancha; parecía llevarlo para afianzar expresamente la impresión de robustez que transmitía. Rostro cuadrado y difuso aspecto de hostilidad. Llevaba perilla, una recortada y gris sobre el anguloso mentón; en cierta forme tenía aspecto de matón. <br />El hombre miró un momento hacia donde él estaba, y durante ese instante, Almodóvar pensó que sus miradas se habían cruzado. Al momento sin embargo se dio cuenta de que seguramente no, a causa de los destellos de los últimos y oblicuos rayos de la tarde. <br />Se colocó la mano derecha a modo de visera y observó de nuevo al hombre, que en ese momento se subía al coche. Arrancó y se perdió en el ordenado caos de la ciudad. Él se sentó de nuevo y se concentró en un punto indefinido de la pantalla del ordenador, antes de empezar a escribir”.Javier Rodríguezhttp://www.blogger.com/profile/16802771047483745804noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-3992812081340449278.post-1333009188537707922011-09-05T00:14:00.000-07:002011-09-05T00:14:07.217-07:00Día de tormenta<br />
<div style="background-color: transparent;">
<span id="internal-source-marker_0.3826672814320773" style="background-color: transparent; color: black; font-family: Arial; font-size: 11pt; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">Cuando oyeron el primer trueno, los dos compañeros de Elias no pudieron evitar mirarle. Este no levantó la cabeza del documento que estaba leyendo, pero comenzó a tamborilear con sus dedos sobre la mesa. Los otros dos hombres se miraron entre ellos y siguieron trabajando. Oyeron un segundo trueno y escucharon a Elias suspirar.</span><br /><span style="background-color: transparent; color: black; font-family: Arial; font-size: 11pt; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">- Oye ¿os apetece un café? yo voy a tomarme uno ¿os bajáis conmigo?</span><br /><span style="background-color: transparent; color: black; font-family: Arial; font-size: 11pt; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">Elias no dijo nada.</span><br /><span style="background-color: transparent; color: black; font-family: Arial; font-size: 11pt; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">- Yo si me tomaría uno ¿que dices tu? - dijo el otro hombre.</span><br /><span style="background-color: transparent; color: black; font-family: Arial; font-size: 11pt; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">- Tengo que terminar esto.</span><br /><span style="background-color: transparent; color: black; font-family: Arial; font-size: 11pt; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">- Venga, si van a ser treinta minutos.</span><br /><span style="background-color: transparent; color: black; font-family: Arial; font-size: 11pt; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">Elias no contesto a eso. Siguió con la cabeza agachada. Volvieron a escuchar otro estruendo.</span><br /><span style="background-color: transparent; color: black; font-family: Arial; font-size: 11pt; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">- ¿Visteis el partido de ayer? Que bien juega ese chico nuevo.</span><br /><span style="background-color: transparent; color: black; font-family: Arial; font-size: 11pt; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">- Si, un genio, cada vez que coje la pelota... ¿tú que dices Elias? fue muy bueno</span><br /><span style="background-color: transparent; color: black; font-family: Arial; font-size: 11pt; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">Dijo algo, pero no lo oyeron. La tormeta cada vez estaba mas cerca.</span><br /><span style="background-color: transparent; color: black; font-family: Arial; font-size: 11pt; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">- ¿Como has dicho?</span><br /><span style="background-color: transparent; color: black; font-family: Arial; font-size: 11pt; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">- Que no lo vi.</span><br /><span style="background-color: transparent; color: black; font-family: Arial; font-size: 11pt; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">Los dos hombres vieron como empezaba a temblar ligeramente. Uno de ellos hizo como que se le caía un bolígrafo y se agachó a recogerlo. Elias estaba moviendo compulsivamente una de sus piernas.</span><br /><span style="background-color: transparent; color: black; font-family: Arial; font-size: 11pt; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">- Creo que va a ser mejor que os vayáis a tomar ese café. Yo tengo que cosas que hacer. Ya lo sabéis.</span><br /><span style="background-color: transparent; color: black; font-family: Arial; font-size: 11pt; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">- Pero Elias...</span><br /><span style="background-color: transparent; color: black; font-family: Arial; font-size: 11pt; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">- Tranquilos - dijo interrumpiendo - voy a estar bien. Marchaos. Va a ser lo mejor para todos.</span><br /><span style="background-color: transparent; color: black; font-family: Arial; font-size: 11pt; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">Los dos hombres se miraron. Uno de ellos se puso de pie y el otro le imito.</span><br /><span style="background-color: transparent; color: black; font-family: Arial; font-size: 11pt; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">- Bueno, pues vamos a estar abajo si te apetece unirte.</span><br /><span style="background-color: transparent; color: black; font-family: Arial; font-size: 11pt; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">Esperaron durante un instante. Nadie dijo nada. Pudieron oír el ruido de la lluvia golpeando los cristales. Uno de los hombres hizo un gesto con la cabeza al otro y los dos salieron de la oficina. Bajaron las escaleras hasta el portal. El estallido de un trueno les hizo detenerse en seco. Parecía que la tormenta estaba sobre ellos.</span><br /><span style="background-color: transparent; color: black; font-family: Arial; font-size: 11pt; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">- ¿Crees que va a venir?</span><br /><span style="background-color: transparent; color: black; font-family: Arial; font-size: 11pt; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">- No, no lo va a hacer.</span><br /><span style="background-color: transparent; color: black; font-family: Arial; font-size: 11pt; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">- Entonces deberíamos volver. Antes de que sea tarde. Puede que le hagamos cambiar de opinión.</span><br /><span style="background-color: transparent; color: black; font-family: Arial; font-size: 11pt; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">El otro hombre hizo un gesto con la cabeza y volvieron a subir las escaleras hasta el tercer piso. Abrieron la puerta de la oficina y no vieron a Elias. Sobre su mesa había un estuche de trompeta abierto y vacío. Los dos salieron apresuradamente y subieron los dos pisos que les separaban de la azotea. Encontraron la puerta abierta. Elias estaba en medio de la esplanada, tocando el instrumento. Tenia la camisa pegada al cuerpo y casi transparente debido al agua. Ninguno de los dos hombres cruzo la puerta.</span><br /><span style="background-color: transparent; color: black; font-family: Arial; font-size: 11pt; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">- ¿Y esto hasta cuando va a durar?</span><br /><span style="background-color: transparent; color: black; font-family: Arial; font-size: 11pt; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap;">- Hasta que supere lo de su mujer, o le parta un rayo como a ella.</span></div>
Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/00143319790218670240noreply@blogger.com5tag:blogger.com,1999:blog-3992812081340449278.post-6479989532848678052011-08-10T11:52:00.000-07:002011-08-10T23:17:13.330-07:00Un café gratis<span class="Apple-style-span" style="font-family: 'Times New Roman'; font-size: medium; "><div style="background-color: transparent; "><span id="internal-source-marker_0.19122308772057295" style="font-size: 11pt; font-family: Arial; color: rgb(0, 0, 0); background-color: transparent; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">La máquina de café se habia vuelto a quedar con mi dinero. Busqué en los bolsillos, pero no encontré mas monedas. Además habia dejado la cartera sobre mi mesa. Me quedé remoloneando a la espera de que a alguién le apeteciese un café. Era aún temprano como para que nadie de la oficina quisiera un tentenpie de media mañana, y demasiado tarde para el desayuno.</span>
<br /><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; color: rgb(0, 0, 0); background-color: transparent; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">- Que resaca, tio.</span>
<br /><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; color: rgb(0, 0, 0); background-color: transparent; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">Mauro entró dando voces en la cocina. Tenía al rededor de los cuarenta, pero no habia superado su adolescencia. </span>
<br /><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; color: rgb(0, 0, 0); background-color: transparent; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">- ¿Y eso? - le pregunté.</span>
<br /><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; color: rgb(0, 0, 0); background-color: transparent; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">- Bueno, que mas que resaca es cansancio de anoche.</span>
<br /><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; color: rgb(0, 0, 0); background-color: transparent; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">- Coño, invitate a un café y me lo cuentas. Solo y sin azucar.</span>
<br /><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; color: rgb(0, 0, 0); background-color: transparent; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">El tipo puso un par de monedas en la máquina. Leyó los botones despacio. Los mismos que llevaba leyendo tres años. Pulsó dos.</span>
<br /><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; color: rgb(0, 0, 0); background-color: transparent; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">- Ayer estuvimos en el bar de abajo, hasta que cerraron. Y luego nos fuimos a tomar algo por ahí con los camareros. Tambien se vino Virginia con nosotros.</span>
<br /><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; color: rgb(0, 0, 0); background-color: transparent; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">- ¿La camarera esa morena, con los ojos verdes? Es guapisima.</span>
<br /><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; color: rgb(0, 0, 0); background-color: transparent; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">- Si esa. Bueno, pues me la follé - dijo dandome un golpe en el pecho con el dorso de la mano y casi gritando.</span>
<br /><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; color: rgb(0, 0, 0); background-color: transparent; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">Me pasó el vaso con café que salia en ese momento. </span>
<br /><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; color: rgb(0, 0, 0); background-color: transparent; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">- Que cabrón. Mira que está buena - dije intentando disimular que su vida sexual me importa una mierda, y menos la de la camarera del bar a la que solo conozco de vista.</span>
<br /><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; color: rgb(0, 0, 0); background-color: transparent; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">- Pues que fuerte. Vamos a su casa, nos metemos en faena y en esto que me bajo al pilón y meto mi cara entre sus piernas. Tio, tiene el coño mas peludo del mundo. En serio. Aunque eso ya se veia, por que no veas que pelotes negros tiene en los brazos.</span>
<br /><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; color: rgb(0, 0, 0); background-color: transparent; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">Sonrio y le doy un trago al café. Tengo la sensación de que este va a ser el café gratis mas caro que me he tomado nunca.</span>
<br /><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; color: rgb(0, 0, 0); background-color: transparent; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">- Y que clítoris, tio. Así, grande, como medio dedo. Una cosa enorme. Es el mas grande que he chupado nuna.</span>
<br /><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; color: rgb(0, 0, 0); background-color: transparent; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">- ¿Como que clitoris?</span>
<br /><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; color: rgb(0, 0, 0); background-color: transparent; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">- Coño, pues el clitoris, la pepita del amor. - Me dice. Noto indignación en su voz.</span>
<br /><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; color: rgb(0, 0, 0); background-color: transparent; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">- No sabía que a ti te fuesen esas cosas.</span>
<br /><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; color: rgb(0, 0, 0); background-color: transparent; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">- Comer coños es lo que mas me gusta ¿A ti no o que? A ver si vas a ser maricón - dijo a la vez que sacaba su café de la máquina.</span>
<br /><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; color: rgb(0, 0, 0); background-color: transparent; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">- ¿Pero entonces no lo sabes?</span>
<br /><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; color: rgb(0, 0, 0); background-color: transparent; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">- El que.</span>
<br /><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; color: rgb(0, 0, 0); background-color: transparent; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">- Pues que Virginia es hermafrodita - miré mi vaso de café, que ya estaba por la mitad.</span>
<br /><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; color: rgb(0, 0, 0); background-color: transparent; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">- Venga, venga. Que no me la cuelas.</span>
<br /><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; color: rgb(0, 0, 0); background-color: transparent; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">- Pero si salió en la tele. Y en los periodicos. -dije con toda tranquilidad- Es la presidenta de una asociación.</span>
<br /><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; color: rgb(0, 0, 0); background-color: transparent; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">Por un momento Mauro se quedó callado. Me cogió del hombro y me miró fijamente a los ojos.</span>
<br /><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; color: rgb(0, 0, 0); background-color: transparent; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">- ¿Es eso verdad?</span>
<br /><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; color: rgb(0, 0, 0); background-color: transparent; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">- Si, joder, lo sabe todo el mundo.</span>
<br /><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; color: rgb(0, 0, 0); background-color: transparent; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">- ¿Me estas diciendo que me he pasado toda la noche chupando una polla enana?</span>
<br /><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; color: rgb(0, 0, 0); background-color: transparent; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">- No, eso me lo estás diciendo tu. </span>
<br /><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; color: rgb(0, 0, 0); background-color: transparent; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">Apuré de un trago lo que quedaba de café, tiré el vaso a la papelera y salí por la puerta.</span></div></span>Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/00143319790218670240noreply@blogger.com3tag:blogger.com,1999:blog-3992812081340449278.post-43138809802674926232011-07-25T09:14:00.001-07:002011-07-25T09:18:29.642-07:00Chantal Maillard<span style="font-size: small;"><i style="font-style: normal;"><span style="color: #84b0d6; font-family: Georgia;">No existe el infinito...</span><span style="color: #84b0d6; font-family: Georgia;"><br />
<br />
No existe el infinito:<br />
el infinito es la sorpresa de los límites.<br />
Alguien constata su impotencia<br />
y luego la prolonga más allá de la imagen, en la idea,<br />
y nace el infinito.<br />
El infinito es el dolor<br />
de la razón que asalta nuestro cuerpo.<br />
No existe el infinito, pero sí el instante:<br />
abierto, atemporal, intenso, dilatado, sólido;<br />
en él un gesto se hace eterno.<br />
Un gesto es un trayecto y una trayectoria,<br />
un estuario, un delta de cuerpos que confluyen,<br />
más que trayecto un punto, un estallido,<br />
un gesto no es inicio ni término de nada,<br />
no hay voluntad en el gesto, sino impacto;<br />
un gesto no se hace: acontece.<br />
Y cuando algo acontece no hay escapatoria:<br />
toda mirada tiene lugar en el destello,<br />
toda voz es un signo, toda palabra forma<br />
parte del mismo texto.<br />
</span> </i></span><span style="color: #84b0d6; font-family: Georgia; font-size: small;"> <i><br />
De "Matar a Platón" 2004</i></span>Madricitahttp://www.blogger.com/profile/01980803572679393148noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-3992812081340449278.post-82458903871642296182011-07-18T09:42:00.000-07:002011-07-18T09:43:48.038-07:00Cadáver exquisito I<div style="text-align: justify;">Dime,¿Qué te parece? ¡Oh! No te ha gustado. ¡Vaya! Me lo temía. Era mi hija, sí; pero se perdió. no tengo ganas de que toques el piano ahora. Hay más opciones. También puedes decirme, "la vida es maravillosa", y nos vamos a bailar. Bailar: movimiento realizado por el cuerpo humano, que tiende a la sincronización melódica. sincronización perfecta. libertad inusual. ¡ A bailar, pequeños vástagos!</div><div style="text-align: justify;"><br />
</div><div style="text-align: justify;">Las macetas estaban secas, la noche avanzada, los semáforos sólo encendían el ámbar. Pero él atravesó la calle ensimismado en la respuesta que tenía que dar al día siguiente, sin darse cuenta de que alguien se abalanzaba sobre él. Era un amigo de la infancia. Se pararon en media calle. Gesticulaban y los que pasaban se quedaban mirando. Interrumpían el paso. El oficial ordenó continuar la marcha: </div><div style="text-align: justify;">- ¡Cadetes! ¡ Al galope!</div><div style="text-align: justify;"><br />
Los parroquianos, acostumbrados a sus jamelgos, abrasados por el trabajo rural, quedaban admirados al contemplar a aquellos jinetes en sus esbeltas monturas. Que llegan poco a poco a la taberna donde revolotean las más intrincadas alevosías, que tienen que devolver los últimos reclusos de la mejor cárcel que encontraron en su vida. No iban más allá. Ir. ¿Dónde? No hay lugar. no hay escapatoria. Sólo la cárcel de sus vidas. De donde no querían escapar. Ella era su carcelera. Él era su carcelero. Y les gustaba. Y delinquían sin perdón. Sin buscar una salida hacia dónde? No, decidí estar sentada junto a la ventana y esperarte. Una mañana apareció un hombre que se llamaba Joau o John, o algo así. Se quedó mirando y me dijo. ¿ No eres demasiado joven para esperar?</div><div style="text-align: justify;"><br />
</div><div style="text-align: justify;">¿Qué es lo que debía esperar? Tanto tiempo olvidando lo que no quería recordar... tanto tiempo deseando que llegara aquel momento trágico, espléndido, ideal...Y era todo muerte.</div><div style="text-align: justify;"><br />
</div><div style="text-align: justify;">Cuando se acaba todo seguimos en algún sitio. Como me gusta la frase de la viuda que dice : " Paco, donde te encuentres, mira cómo sufro". Cuando debía decir " ¿por qué te fuiste?".</div><div style="text-align: justify;"><br />
</div><div style="text-align: justify;">Me fui porque todos se drogaban, todo era caótico, aunque me digan que no, que hay otras cosas además de las drogas. Pero, ¿qué hay? Si no un grupo, que cansado de estar en casa con sus papás, cogieron la tienda de campaña y la plantaron en medio de la ciudad. Y el que pasaba pensó: " ¿y por qué no hago yo lo mismo?". y se unió al otro y al otro. Y ahora, ¿qué hacemos?</div><div style="text-align: justify;"><br />
</div><div style="text-align: justify;">Siempre se habían hecho la misma pregunta, desde que comenzaron a salir juntos quince años atrás. De repente, Laura se paró en mitad de la calle.</div><div style="text-align: justify;">-Alfredo, no quiero continuar.</div><div style="text-align: justify;">Alfredo, como siempre, pensaba en sus cosas sin prestar ninguna atención a lo dicho por Laura.</div><div style="text-align: justify;">Ella me dijo que no quería volver a verme. le dije que no me importaba dos veces. No me importa. No me importa. No me importa. Tres veces.¿ Cuántas veces podemos pasar por esto? Ya ni una más. De todas las alternativas, elegimos la peor. No debíamos seguir con aquello.</div><div style="text-align: justify;"> DEBER</div><div style="text-align: justify;"> DEBER</div><div style="text-align: justify;"> DEBER</div><div style="text-align: justify;"><br />
¿Y ahora qué? Ahora nada. Adiós, mi vida. Adiós.</div><div style="text-align: justify;"><br />
</div><div style="text-align: justify;"><br />
</div><div style="text-align: justify;"><br />
</div><div style="text-align: justify;"><br />
</div>Madricitahttp://www.blogger.com/profile/01980803572679393148noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-3992812081340449278.post-12254368317928137932011-07-10T23:43:00.000-07:002011-07-10T23:46:28.654-07:00Esperanza, 6 meses depués (III)<iframe width="425" height="349" src="http://www.youtube.com/embed/J5j-ipGFcko" frameborder="0" allowfullscreen=""></iframe><div><br /></div><div><div style="background-color: transparent; margin-top: 0px; margin-left: 0px; margin-bottom: 0px; margin-right: 0px; font-family: 'Times New Roman'; font-size: medium; "><span id="internal-source-marker_0.8283506245352328" style="font-size: 11pt; font-family: Arial; color: rgb(0, 0, 0); background-color: transparent; font-weight: normal; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">Me quedo dormida viendo una prueba ciclista. Despierto completamente empapada de sudor. No es lo único de lo que estoy empapada. Decido solucionar el ultimo problema primero y luego darme una ducha. Después de la ducha me peso. He ganado dos kilos en los últimos meses. Me miro al espejo. Parece que han ido a parar al culo. Bueno, no esta mal. Son las seis y media de la tarde. Llamo a Yoli otra vez. No contesta. Me siento delante del ordenador. Me aburro. No aguanto ni media hora. Voy a limpiar la cocina. No hay nada que limpiar. Voy al baño. Friego la taza y el lavabo, luego la bañera. Por ultimo el suelo. Aquello me relaja.</span><br /><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; color: rgb(0, 0, 0); background-color: transparent; font-weight: normal; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">A las ocho me llama Yoli. Conversión breve. Quedamos en vernos a las diez en el Café Central. Tengo dos horas por delante. Me tumbo en la cama y miro el techo. Cojo un libro. Leo dos paginas. Lo tiro al suelo. Cojo el bote de lubricante. Va a ser la segunda vez hoy. Me doy cuenta de como extraño a Ulises. Después voy a maquillarme y peinarme. Decido jugar a las muñequitas provándome vestidos. Se que no me va a llevar a ninguna parte, ya tengo decidido lo que me voy a poner, pero al menos me entretengo. Decido tirar a la basura un par de modelitos. No por que me vengan mal ni esten pasados de moda. Simplemente no me apetece que estén en mi armario. Son las nueve y media. Tengo que irme. Desde el recibidor veo el libro tirado en el suelo de la habitación junto al bote de lubricante. Voy a recogerlo. No. Me quedo a medio camino. Salgo por la puerta. Al fin y al cabo nadie va a venir a preguntarme por el desorden de mi casa.</span></div></div>Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/00143319790218670240noreply@blogger.com9tag:blogger.com,1999:blog-3992812081340449278.post-1754066023663779872011-07-10T23:31:00.000-07:002011-07-10T23:32:25.022-07:00Esperanza, 6 meses depués (II)<iframe width="425" height="349" src="http://www.youtube.com/embed/4fb5uxIWPfg" frameborder="0" allowfullscreen=""></iframe><div><br /></div><div><div style="background-color: transparent; margin-top: 0px; margin-left: 0px; margin-bottom: 0px; margin-right: 0px; font-family: 'Times New Roman'; font-size: medium; "><p dir="ltr" id="internal-source-marker_0.8283506245352328" style="text-align: justify; margin-top: 0pt; margin-bottom: 0pt; "><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; color: rgb(0, 0, 0); background-color: transparent; font-weight: normal; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">Cambio de música por si al informático melómano le da por volver por aquí. Sigo trabajando. Va pasando el tiempo. Lo sé por que cada vez tengo mas hambre. Son ya las doce. En dos horas estoy fuera. Angel, del departamento legal asoma su cabeza por mi despacho.</span></p><p dir="ltr" style="text-align: justify; margin-top: 0pt; margin-bottom: 0pt; "><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; color: rgb(0, 0, 0); background-color: transparent; font-weight: normal; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">- ¿Que haces hoy para comer?¿te vienes a algún sitio? Nosotros vamos a “el independiente”.</span></p><p dir="ltr" style="text-align: justify; margin-top: 0pt; margin-bottom: 0pt; "><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; color: rgb(0, 0, 0); background-color: transparent; font-weight: normal; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">Cuando dice “nosotros” se refiere a sus compañeros de departamento, aunque es tan estirado que perfectamente podría usar un plural mayestático.</span></p><p dir="ltr" style="text-align: justify; margin-top: 0pt; margin-bottom: 0pt; "><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; color: rgb(0, 0, 0); background-color: transparent; font-weight: normal; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">- No, tengo comida con la familia. Pero otro día me apunto.</span></p><p dir="ltr" style="text-align: justify; margin-top: 0pt; margin-bottom: 0pt; "><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; color: rgb(0, 0, 0); background-color: transparent; font-weight: normal; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">Es cierto lo de la comida con la familia. Pero no pienso apuntarme ningún otro día. Ya se lo dije, yo no tengo relaciones con la gente con la que trabajo, pero él no deja de insistir. Siempre intenta que nos veamos fuera de la oficina. Si como abogado es la mitad de insistente que como galán, entonces tiene que ser cojonudo en su trabajo.</span></p><p dir="ltr" style="text-align: justify; margin-top: 0pt; margin-bottom: 0pt; "><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; color: rgb(0, 0, 0); background-color: transparent; font-weight: normal; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">- Bueno, luego nos iremos a tomar unas copas, como siempre. Si terminas, llámame y te decimos donde estamos.</span></p><p dir="ltr" style="text-align: justify; margin-top: 0pt; margin-bottom: 0pt; "><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; color: rgb(0, 0, 0); background-color: transparent; font-weight: normal; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">- Si, si, claro. Cuando acabe te llamo y me tomo una con vosotros.</span></p><p dir="ltr" style="text-align: justify; margin-top: 0pt; margin-bottom: 0pt; "><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; color: rgb(0, 0, 0); background-color: transparent; font-weight: normal; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">He representado tanto este papel que podría hacerlo incluso en coma.</span></p><p dir="ltr" style="text-align: justify; margin-top: 0pt; margin-bottom: 0pt; "><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; color: rgb(0, 0, 0); background-color: transparent; font-weight: normal; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">Sigo trabajando. Me llama mi abuelo.</span></p><p dir="ltr" style="text-align: justify; margin-top: 0pt; margin-bottom: 0pt; "><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; color: rgb(0, 0, 0); background-color: transparent; font-weight: normal; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">- Caridad, hija. ¿como estas? Oye, ¿te importa si dejamos la comida para otro día? es que me ha salido algo que hacer.</span></p><p dir="ltr" style="text-align: justify; margin-top: 0pt; margin-bottom: 0pt; "><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; color: rgb(0, 0, 0); background-color: transparent; font-weight: normal; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">- No abuelo, no pasa nada.</span></p><p dir="ltr" style="text-align: justify; margin-top: 0pt; margin-bottom: 0pt; "><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; color: rgb(0, 0, 0); background-color: transparent; font-weight: normal; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">- ¿La semana que viene bien que vayamos a comer en un restaurante?</span></p><p dir="ltr" style="text-align: justify; margin-top: 0pt; margin-bottom: 0pt; "><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; color: rgb(0, 0, 0); background-color: transparent; font-weight: normal; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">- Ya lo hablamos esta semana, abuelo.</span></p><p dir="ltr" style="text-align: justify; margin-top: 0pt; margin-bottom: 0pt; "><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; color: rgb(0, 0, 0); background-color: transparent; font-weight: normal; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">- Hasta luego, entonces.</span></p><p dir="ltr" style="text-align: justify; margin-top: 0pt; margin-bottom: 0pt; "><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; color: rgb(0, 0, 0); background-color: transparent; font-weight: normal; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">Mi abuelo no me ha dado explicaciones, ni yo se las he pedido, pero imagino que se va con su nueva amiga. Desde que mi abuela murió ha rehecho su vida. Muy deprisa, segun algunos, pero yo creo que ya lo tenia asumido.</span></p><p dir="ltr" style="text-align: justify; margin-top: 0pt; margin-bottom: 0pt; "><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; color: rgb(0, 0, 0); background-color: transparent; font-weight: normal; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">Cojo el teléfono.</span></p><p dir="ltr" style="text-align: justify; margin-top: 0pt; margin-bottom: 0pt; "><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; color: rgb(0, 0, 0); background-color: transparent; font-weight: normal; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">- Yoli, me he quedado sin plan para comer.</span></p><p dir="ltr" style="text-align: justify; margin-top: 0pt; margin-bottom: 0pt; "><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; color: rgb(0, 0, 0); background-color: transparent; font-weight: normal; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">- Estoy con Alberto. Vamos a comer juntos. Luego te llamo.</span></p><p dir="ltr" style="text-align: justify; margin-top: 0pt; margin-bottom: 0pt; "><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; color: rgb(0, 0, 0); background-color: transparent; font-weight: normal; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">Cuelga el telefono.</span></p><p dir="ltr" style="text-align: justify; margin-top: 0pt; margin-bottom: 0pt; "><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; color: rgb(0, 0, 0); background-color: transparent; font-weight: normal; font-style: normal; font-variant: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">Las dos y media. Me voy a casa. Tengo la nevera llena. Podría cocinar cualquier cosa. Creo que lo mejor sera descongelar unos canelones. Me los como delante de la tele, con una cerveza.</span></p></div></div>Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/00143319790218670240noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-3992812081340449278.post-68025449410716979722011-07-08T06:05:00.000-07:002011-07-08T06:12:49.908-07:00Gran VïaEn lugar de entrar en el cine, que era su plan inicial, Julián pasó de largo de la taquilla, giró sobre sí mismo y volvió a enfilar la calle lateral por la que había llegado, desandando sus pasos, para regresar a la Gran Vía. <br /><br />No tenía ni idea de lo que iba a hacer en las horas siguientes, pero le gustó la sensación repentina de sorpresa que así, sin más, se había regalado a sí mismo. Al llegar a la esquina de lo que fue el Carlton se paró, para observar si su ánimo y el de la ciudad podrían llegar juntos a alguna parte, aquella tarde.<br /><br />Tráfico tumultuoso, cómo no. <br />Edificios tan bellos como el primer día que los vio, treinta años atrás. Su conjunto componía una reconfortante mezcla de cercanía y suntuosidad. <br />Gente: racimos, filas caóticas, figuras sueltas. <br />Miradas. Miradas como modo de representación fugaz en el alargado escenario de la calle, que parecía haber sido creada a tal efecto. La Gran Vía no era solo una calle, pensó, mientras orientaba sus pasos hacia Plaza de España. Se trataba de la condensación de lo significaba vivir en Madrid. <br />Volvió a observar los rostros de los transeúntes con los que se cruzaba. Vio gestos sabiamente incorporados por décadas de urbanita socialización. La sensación general que le provocaban los transeúntes que observaba era cambiante, como un variopinto fluido. <br /><br />Pensó en la idea de sentirse perdido. Se había sentido así, y hasta hace no demasiado. Mucho y durante mucho tiempo. <br />Ahora ya no; o al menos no del modo devastador que le había obligado a separarse de Estela. Al final no había encontrado su sitio ideal: lo que durante casi toda su vida había considerado El Lugar. En cierta forma un delirio, una alucinación. Ahora se sentía mejor: al menos había conseguido uno, el suyo. Uno donde había personas, y no solo fantasmas.<br />Llegó a la Plaza de España. Caminó atravesándola en dirección sur. Antes de abandonarla con el templo de Debod ya a la vista, observó de refilón la estatua de Don Quijote, de quien en cierta época se había sentido acompañado, inútilmente.Javier Rodríguezhttp://www.blogger.com/profile/16802771047483745804noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-3992812081340449278.post-35534392915451363582011-06-22T01:47:00.000-07:002011-06-22T01:48:45.950-07:00Notas sobre el autor de Locuras Cotidianas<div class="clear" id="article-intro"><h1>Petr Zelenka: “Kundera es un idiota” </h1><div class="column span-2"><div class="img"><img alt="Petr Zelenka: “Kundera es un idiota”" src="http://medias2.cafebabel.com/1976/thumb/355/-/petr-zelenka-kundera-es-un-idiota-petr-zelenka-kundera-es-un-idiota.jpg" width="355" /> <br />
<div class="info-co">Zelenka durante una conferencia de prensa en Varsovia Varsovie (Foto, NS)</div></div><div class="article-text-intro">A sus cuarenta años, este realizador nacido en Praga es el director y guionista checo de nueva generación más premiado. Ha hablado de la soledad, la tristeza y de la identitad europea.</div></div><div class="article-identity"><div class="h6"><br />
</div><div class="community"><span class="author"> por <a href="http://www.cafebabel.pl/profile/display/427f8bd8-fc10-102c-898b-e5384fe1717a/" id="ext-gen67">Natalia Sosin</a> <a href="http://www.cafebabel.es/profile/messages/sendTo/427f8bd8-fc10-102c-898b-e5384fe1717a/Natalia%20Sosin/" id="ext-gen27" style="outline: 0pt none;" title="envía un mensaje a Natalia Sosin">@</a> </span> <span class="translator"> Traducción: mariola moreno </span> </div><div class="date">27/04/07</div><div class="date"><br />
</div></div></div><div class="article-text" lang="es-ES">Fue gracias a sus padres, que trabajaban en la televisión pública, como entró en contacto con los rodajes. Al término de sus estudios secundarios, se encontró dividido entre las matemáticas y los guiones. Al final, prevaleció su inclinación por las películas y fue así como Zelenka se convirtió en estudiante de la reconocida escuela de cine <span class="caps">FAMU</span>, de Praga. En la actualidad, reconocido y laureado fuera de las fronteras checas, planea hacer una version contemporánea de la novela rusa <i>Los Hermanos Karamazov</i>.<br />
<h2>Nadie sabe lo que es la tristeza y la felicidad</h2>El encuentro tiene lugar en La Casa Blu, un centro popular de estudiantes, y uno de los escenarios de <i>Loners</i>, una de las obras de Zelenka. Concebida en principio como un documental sobre un grupo de amigos, <i>Loners</i> se convirtió en una exitosa película en muchos países de Europa. ¿Es la soledad algo inherente a la juventud checa? “No, la soledad es algo propio de los europeos. Recuerdo haber leído una encuesta que decía que el 85% de la gente de Bangladesh se consideran felices, mientras que en Alemanía el porcentaje era del 35%. ¿Qué significa esto? Nada. Porque, ¿qué es la felicidad? Creo que nuestra capacidad de cambiar las cosas es bastante insignificante. No creo en personalidades fuertes capaces de cambiar el mundo y por ello mis personajes son diferentes”.<br />
La mejor encarnación de estos personajes la representa Jacob, en <i>Loners</i>: es un adicto a las drogas. Mientras escucha el himno nacional checo, dice: “Tengo que haber oído esto en alguna parte antes…”<br />
<span class="dquo">“</span>Se supone que los solitarios [Loners] son aún más tristes; el director, David Ondricek, revitalizó algo a los ocho protagonistas del documental”. ¿De dónde procede toda esta tristeza? “Bueno, reflexionar sobre la vida deprime; pensar en los errores, las relaciones, la gente a la que echas de menos o que murieron antes de que las llegáramos a conocer. Todo esto entristece y nosotros, seres humanos, siempre tendemos a pensar cosas deplorables. Sobre esto gira la tristeza del mundo entero”.<br />
<h2>La vida es ilógica</h2>Los personajes retratados en otra de sus películas, <i>The Buttoners</i> no se enfrentan al problema de la soledad pero si a diferentes fobias. ¿De donde procede semejante idea? “Se trata simplemente de un recurso: la gente retiene un personaje en su mente gracias a las fobias presentes en la película. A veces conozco a gente peculiar, aunque en otras ocasiones, las invento. Creé un personaje que destrozaba tapicerias arrancándolas con dentaduras. Sin embargo, el <i>chico espray</i> es real, existe. Conozco a uno que usa 30 tipos de aerosol, cada uno para una parte de su cuerpo, para una prenda distinta. Los lleva en una maleta especial y de vez en cuando se rocía el pelo, los zapatos, el aire…, todo eso junto produce un terrible espanto”.<br />
Petr Zelenka es un hombre lleno de contradicciones. Sonríe mucho mientras habla de tristeza, lo que hace dificil dilucidar si está hablando en serio o si su razonamiento es sólo una broma surrealista. Pedimos otra taza de café y cambiamos de tema. Zelenka trabaja en su nueva obra. “Es un proyecto en Cracovia. Va a ser rodado en exclusiva en su Teatro Antiguo dentro de 18 meses. Rodamos en mayo y octubre. Me mudaré a Cracovia y aprenderé polaco para comunicarme con los actores. Allí no todo el mundo habla inglés y quiero estar en disposición de mantener una conversación personal, sin ayuda de un intérprete”. ¿Aprender un idioma solo para realizar un espectáculo? Por qué no. Zelenka es muy realista sobre el trabajo fuera de la República Checa. “Quise trabajar en inglaterra, pero los británicos son una sociedad muy hermética. Pienso lo mismo de los franceses. Me sentía muy frustrado y ante mí surgío Polonia. No es muy lógico, pero así es como sucedió todo. La vida es ilógica en sí misma, así que sigo su camino ilógico en busca de la felicidad en Polonia”.<br />
Como un nómada que se asienta por un tiempo, la idea le resulta muy promedora a este artista de 40 años. “Cracovia supone un gran giro en mi vida. Forma parte también del Imperio Austrohúngaro, así que es casi como Praga. Aunque en pequeño. El ambiente, por lo visto, es magnífico”.<br />
<h2>Praga en la retina</h2>A pesar de esta adoración, no oculta su pasión por su ciudad natal. “Cuando la comparas con otras grandes ciudades, es un auténtico paraíso. Los comienzos de los noventa, con la llegada de muchos americanos, supuso una edad de oro para Praga. Era una locura. Todo fue restaurado y surgieron un montón de locales nuevos. Aunque esta atmósfera se ha perdido, aún se puede vivir aquí. Praga es tranquila, barata y tiene los mejores medios de transporte publico del mundo. Todo lo que un escritor necesita”. En cuanto a las desventajas: “La gente sin hogar. Hay una película de Abel Ferrara, <i>Driller Killer</i>, sobre un chico que mata a un sin techo con un taladro. Deberían pensar aquí en soluciones similares, pero por desgracia nuestro Gobierno es demasiado blando para hacer eso”, suelta corrosivo acerca de los que han hecho de la mendicidad un modo de vida.<br />
Zelenka es comparado con los mas grandes nombres de la literatura checa: Hrabal, Kundera, aunque está en completo desacuerdo con esa afirmación. “Es ridículo compararme con Hrabal porque era un autor estupendo… Mientras que Kundera… Ya sabe que no me gusta…” Durante un encuentro en el Instituto de Teatro de Varsovia lo llamó “idiota”. “Sí, y luego admití que fue un error e intenté leer <i>La insoportable levedad del ser</i>, pero fui incapaz. Luego, volví a reconocer que era un idiota. Roba cosas de otros autores, las toma prestadas de sus propios libros y lo que es peor, es un escritor malo. ¿No es obvio?” –una señal de desagrado se desdibuja en su cara. “Sus novelas son técnicamente buenas. Sabe cómo poner ideas juntas de un modo ingenioso y puedes decir lo que quieras de él pero en eso es honesto”.<br />
<h2>Ya no hay románticos</h2>Zelenka se muestra también muy crítico con los herederos de la Revolucion de Terciopelo. “El problema de la <i>intelligentsia</i> checa es que hay de todo menos inteligencia. Recuerdo que en los setenta era muy popular entre gente educada emplear un lenguaje sucio. ¿Por qué? Nadie lo sabe. Creo que era algo muy checo, como una autodenigración por medio del lenguaje”.<br />
¿Y las nuevas generaciones? “Saben qué quieren y lo quieren. Están carentes de sentimientos románticos. Ser romántico no es ir a la montaña, puedes vivir como un perro porque tu personaje favorito de novela vivía de un modo similar. Encontrar fragmentos de belleza en el terrible mundo comunista era romántico en un sentido que la gente joven no acepta hoy”.<br />
¿El aclamado artista en Europa se siente europeo? “Para mí, Europa es cuestión de dinero, de cooperacion política, de diferentes programas. No me siento europeo porque no fui educado así. Estas cosas se inculcan en la niñez, no se aprenden”.<br />
<h2><br />
</h2><br />
</div>Madricitahttp://www.blogger.com/profile/01980803572679393148noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-3992812081340449278.post-25391512916042820922011-06-22T01:35:00.000-07:002011-06-22T01:35:29.706-07:00Lectura dramatizada esta tarde en la Buena Vida<b>miércoles 22 a las 20:30 horas</b><br />
terminaremos la 1ª edición del<br />
<a href="http://labuenavidaweb.wordpress.com/bohemia-express-lo-mejor-de-la-cultura-checa-en-la-buena-vida/" target="_blank"><span style="font-size: medium;">Festival Bohemia Express</span></a>,<br />
en el que hemos podido disfrutar de lo mejor de la poesía, literatura, música, cine y documental checos, gracias a la colaboración del <b>Centro Checo</b> de Cultura de Madrid. El programa para esta última sesión es:<br />
<br />
<div class="ecxMsoNormal" style="color: black;"><b>Lectura dramatizada de <i>Locuras cotidianas</i> de </b><b>Petr Zelenka</b></div><span style="color: black;"> </span><div class="ecxMsoNormal" style="color: black;">- Introducción a Zelenka y su obra, y pequeña revisión del teatro checo contemporáneo a cargo de Carlo Be y Tusti de las Heras<br />
- <span style="font-size: medium;">Lectura dramatizada</span> a cargo de los actores Tusti de las Heras, Raúl Jiménez y Fran Arráez</div><span style="color: black;"> </span><span style="color: black;"> - Debate abierto y vino para celebrar esta 1ª edición del Festival Bohemia Express que <br />
siempre ha tenido la música en directo como sorpresa invitada<br />
<br />
Fin de etapa<br />
comienzo del verano<br />
<br />
en</span><br />
<a href="http://labuenavida-cafedellibro.es/" target="_blank"><span style="font-size: x-small;"><span style="font-family: 'Trebuchet MS';"></span></span></a><span style="font-size: x-small;"><a href="http://labuenavida-cafedellibro.es/" target="_blank">La Buena Vida - Café del Libro</a></span><span style="font-family: 'Trebuchet MS'; font-size: 12pt;"><span style="font-size: x-small;"><br />
<a href="http://maps.google.es/maps?f=q&source=s_q&hl=es&geocode=&q=la+buena+vida+-+cafe+del+libro;+madrid&sll=40.396764,-3.713379&sspn=10.887792,19.775391&ie=UTF8&ll=40.420145,-3.711233&spn=0.004982,0.013347&z=16&iwloc=A" target="_blank">Vergara, 10</a><br />
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<span style="color: black;">Abierto de 12:00 a 24:00 todos los días</span></span></span>Madricitahttp://www.blogger.com/profile/01980803572679393148noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-3992812081340449278.post-5458954374947337422011-06-20T23:57:00.000-07:002011-06-20T23:59:12.327-07:00Fin de díaEra un lunes por la noche, un día como tantos otros, como otro cualquiera que pudiera recordar. <br />Ahora, en su memoria, tenía sin embargo el color de ser uno de esos donde la vida parece ir a encasquillarse en cualquier momento, en cualquier lugar: detrás de la expresión vacía de un desconocido; en la seca sensación que queda en el aire cuando una llamada telefónica terminada demasiado pronto; en lo extrañamente arrugado del vestido de una mujer cuando ella llega muy tarde de una cena con amigas.<br /><br />En la oficina el ambiente era tan abiertamente discordante con lo que para él significaba “un buen lugar para trabajar”, que tarde o temprano se volvería loco si no se decidía a irse de allí cuanto antes; pero no era tan fácil. Eran dos a decidir, dos bajo el mismo techo. Y para ella, lo más fácil era que continuara.<br /><br />A mediodía, en su hora libre, pidió un refresco en el bar de enfrente a la oficina después del almuerzo, y al hacerlo se encontró con la mirada de un camarero nuevo, un joven con aspecto de viejo. No le entendió cuando dijo “una coca cola, por favor”, pero no se lo hizo notar con su gesto impertérrito, así que durante unos segundos ambos hombres se encontraron en un mundo privado y absurdo de tensa atonía, enlazados por un malentendido que les iba a separar años luz hicieran lo que hicieran en adelante, aunque volvieran a verse todos los días el resto de sus vidas.<br /><br />Al volver al trabajo se encontró con una de las secretarias de su departamento en pie y delante de la puerta de su despacho, con un teléfono en la mano, en actitud de maternal preocupación. “Es Marcos. Está enfadado”. No hizo mucho por aplacar la conocida furia amanerada de su directo superior, así que escuchó resignadamente y colgó cuando creyó que debía hacerlo, a los pocos minutos.<br /><br />La vida, la cotidiana rutina, solía terminar para él en pequeños fragmentos idénticos cada día a eso de las diez, con la banda sonora de su programa favorito de la televisión como todo acompañamiento, la bandeja vacía, los pies sobre la mesa, los sueños ya lejos, volando rápido, justo en dirección contraria a donde se encontraba él. <br />Ella rara vez le acompañaba ya. <br /><br />También esa noche llegó tarde, con el vestido japonés que le había regalado en su primer aniversario de boda. Al advertir las planas construcciones que las arrugas dibujaban en su espalda, alrededor de la cremallera, supo que, de ahí en adelante, no habría nuevos días como ése.Javier Rodríguezhttp://www.blogger.com/profile/16802771047483745804noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-3992812081340449278.post-19937335448196281472011-06-16T23:47:00.000-07:002011-06-16T23:55:40.569-07:00Esperanza, 6 meses depués (I)<iframe width="560" height="349" src="http://www.youtube.com/embed/e52IMaE-3As" frameborder="0" allowfullscreen=""></iframe><div><br /></div><div><div style="background-color: transparent; margin-top: 0px; margin-left: 0px; margin-bottom: 0px; margin-right: 0px; "><div style="text-align: justify; "><div style="background-color: transparent; margin-top: 0px; margin-left: 0px; margin-bottom: 0px; margin-right: 0px; font-family: 'Times New Roman'; font-size: medium; "><span id="internal-source-marker_0.7993731752503663" style="font-size: 11pt; font-family: Arial; background-color: transparent; font-weight: normal; font-style: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">Son las nueve y cuarto de la mañana y ya hace calor. Debemos estar a treinta y cinco grados. Supongo que el aire acondicionado tiene que estar encendido, pero no se nota nada. Intento concentrarme en el trabajo con algo de música. Pongo una recopilación de piezas' para piano que me pasó Ulises.</span><br /><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; background-color: transparent; font-weight: normal; font-style: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">- Hola, disculpa. Soy del departamento de informática. Estamos haciendo un inventario ¿te importa si paso un momento?</span><br /><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; background-color: transparent; font-weight: normal; font-style: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">La voz viene de la puerta de mi despacho. Es un tipo de unos treinta años, vestido con vaqueros y camiseta con el cartel de una película estampado. Tiene el pelo corto y barba de varios días.</span><br /><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; background-color: transparent; font-weight: normal; font-style: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">- Si, pasa ¿necesitas algo?</span><br /><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; background-color: transparent; font-weight: normal; font-style: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">- No, nada, tranquila. Puedes seguir trabajando. No voy a tardar mucho. Solo anotar unos datos.</span><br /><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; background-color: transparent; font-weight: normal; font-style: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">Viene con un cuaderno en la mano. Se coloca delante de mi, y se mete debajo de la mesa por el lado opuesto al que estoy yo. Instintivamente cruzo las piernas. Hoy llevo un vestido por encima de las rodillas, abotonado completo, y cogido con un cinturón. No acabo de sentirme cómoda, así que me pongo de pie y hago que tengo que buscar algo en un armario.</span><br /><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; background-color: transparent; font-weight: normal; font-style: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">- No todo el mundo escucha música cuando trabaja. - Me dice con cierto esfuerzo al ponerse de pie. Parece un poco pasado de peso.</span><br /><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; background-color: transparent; font-weight: normal; font-style: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">- Bueno, a mi me gusta.</span><br /><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; background-color: transparent; font-weight: normal; font-style: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">- En el despacho nosotros escuchamos música de vez en cuando. Pero somos tantos que a veces es difícil ponerse de acuerdo.</span><br /><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; background-color: transparent; font-weight: normal; font-style: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">- Si, claro - contesto mientras trato de imaginar que clase de música escuchan en un despacho de informáticos.</span><br /><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; background-color: transparent; font-weight: normal; font-style: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; "> - Lo que estás escuchando es muy bueno. Te voy a decir una cosa. A mi las cosas para piano de Beethoven no me gustan nada. Yo prefiero otras cosas.</span><br /><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; background-color: transparent; font-weight: normal; font-style: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">- Si, algo mas moderno ¿no? - digo con condescendencia.</span><br /><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; background-color: transparent; font-weight: normal; font-style: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">- Lo que pasa es que Beethoven siempre me ha parecido muy sobrevalorado. Componía muy bien para orquesta, pero si le dejas un piano, le faltan herramientas. Sin embargo Schubert tiene una riqueza de sonido que no es comparable con ningún otro compositor. Puede que con Debussy, aunque este me parece demasiado onanista. Por que eso es lo que estás escuchando ¿no? el trio para piano número 2 de Schubert.</span><br /><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; background-color: transparent; font-weight: normal; font-style: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">Me quedo sin palabras. Noto calor en la cara y espero que el maquillaje no me falle y cubra bien el sonrojo.</span><br /><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; background-color: transparent; font-weight: normal; font-style: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">- Bueno, ya he terminado. Hasta luego.</span><br /><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; background-color: transparent; font-weight: normal; font-style: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">Le veo salir de mi despacho mientras me pregunto que ha querido decir con que Debussy le parece muy onanista. Me acerco a mirar la pantalla del ordenador para ver lo que está sonando. Ha acertado.</span><br /><span style="font-size: 11pt; font-family: Arial; background-color: transparent; font-weight: normal; font-style: normal; text-decoration: none; vertical-align: baseline; white-space: pre-wrap; ">Suena mi teléfono. Es Yoli. Me pregunta que vamos a hacer esa noche. Al fin y al cabo es viernes. La digo que me apetece salir y tomar algo. Quedamos en llamarnos mas tarde. Al colgar la llamada veo la foto de Ulises en la pantalla de mi móvil. Hace ya un mes y medio que se fué a vivir a Taipei. Me escribe todos los días, aunque yo no le responda. Siempre me dice que me extraña, y cuenta los meses que el quedan para poder volver. Ahora él está lejos y yo estoy sola. A veces tengo la impresión de enamorarme siempre del hombre equivocado.</span></div></div></div></div>Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/00143319790218670240noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-3992812081340449278.post-51910776217206709862011-06-10T02:15:00.001-07:002011-06-13T05:48:46.979-07:00Una francesa<div style="text-align: justify;">Tenía que ser ya las tres de la mañana. El Cinco y yo caminábamos por la Gran Vía de Madrid hacia casa. Era una de esas noches de verano con un calor seco. De las que a todo el mundo le apetece estar en la calle, sobre todo un sábado.</div><div style="text-align: justify;">Dos tipos se nos acercaron y nos preguntaron algo en francés. No entendimos nada de lo que nos decían, así que les vimos marcharse con cierta sensación de frustración.</div><div style="text-align: justify;">El Cinco y yo continuamos caminando.</div><div style="text-align: justify;">- Dicen que la mejor forma de aprender un idioma es durmiendo con alguien que lo hable. No estaría mal hablar francés- Me dijo como el que repite un discurso, supongo que para romper el silencio.</div><div style="text-align: justify;">- ¿Lo dices por estos? Ya. Yo siempre he querido aprender francés, pero me da mucha pereza.</div><div style="text-align: justify;">- Me estaba acordando de una francesa que había en la oficina. - hizo una pausa con la cabeza agachada, mirando al suelo, y las manos a la espalda - No era guapa, para que lo vamos a negar. Era rubia, con el pelo largo. Unos ojos azules acojonantes. Tetas como manzanas gordas, firmes y redondas. Sin embargo tenia un culo absolutamente desproporcionado para su cuerpo, y una nariz aguileña que la afeaba mucho. Aunque tenía ese acento que me volvía loco solo de oírlo.</div><div style="text-align: justify;">- ¿Y que pasó? - me llamó la atención la descripción que había hecho de la mujer. El Cinco siempre era muy discreto con esas cosas.</div><div style="text-align: justify;">- Nada. Cada semana me decía que algún día teniamos que salir a tomar algo, que estaba cansada de sus amigos en Madrid. Me decía que lo que la gustaba era salir, tomar cerveza, charlar. No se, cosas tranquilas de mujer tranquila. La apariencia que daba era de princesita, pero tenia una cara oculta. Como si fuesen dos mujeres distintas. Un día, durante la fiesta de Navidad de la empresa...</div><div style="text-align: justify;">Un tipo de unos treinta años y con un aspecto muy sucio interrumpió la historia para pedirnos un cigarro. No se lo dimos. Habíamos llegado a la Puerta del Sol sin darnos cuenta. Las fuentes estaban llenas de gente sentada al rededor tomando el fresco. Este era el punto en el que teníamos que separarnos.</div><div style="text-align: justify;">- Bueno, pues hasta mañana - dijo El Cinco.</div><div style="text-align: justify;">- Cuéntame el final de la historia de la francesa, cabrón, no me dejes así.</div><div style="text-align: justify;">- Te decía - comenzó, después de una breve pausa - que durante la cena de la empresa fuimos al váter a ponernos unos tiros. Cuando estábamos alli me dice que si alguien nos veía salir juntos pensarían que estaríamos follando. Dijo que eso acabaría con su reputación de niña buena, así que sin duda, lo mejor que podíamos hacer era follar. Si iba a perder su reputación que fuese por algo.</div><div style="text-align: justify;">Los ojos de el Cinco estaban muy abiertos y movía mucho las manos mientras me contaba aquello.</div><div style="text-align: justify;">- Y yo no me la follé. - Dijo con un suspiro - Pensé que estaba de broma. Y simplemente abrí la puerta y salí. Después de que dejase la oficina supe que ella nunca bromeaba con el sexo. Si quería follar lo decía. No se por que nunca la invité a salir. A tomar algo después de la oficina. No lo se. Y mira que me gustaba. Podría haberme acostado con aquella francesa y no la hice caso.</div><div style="text-align: justify;">- ¿Y que piensas?¿Que ahora hablarías francés si lo hubieses hecho? - aquello me salió en tono burlón, aunque intentaba que fuesen palabras de consuelo.</div><div style="text-align: justify;">El Cinco me miró a la cara y me dijo algo con franqueza y seriedad.</div><div style="text-align: justify;">- No. Pero al menos me hubiese follado a una francesa.</div>Anonymoushttp://www.blogger.com/profile/00143319790218670240noreply@blogger.com0